A Rosa María Payá no la ha dejado el Departamento de
Estado hacer preguntas durante la conferencia de prensa de ayer en Washington
con motivo de la reapertura de la embajada cubana. A Orlando Luis Pardo Lazo lo botaron tan
pronto ese mismo departamento lo reconociera como alguien que representa un
grupo anticastrista. Algo así se
dijo. No importa que ambos jóvenes llevaran
credenciales, igual los llevaban los demás presentes y nadie pudo hacer preguntas
durante la conferencia. Bueno a ver, se
hicieron cuatro. Cuatro preguntas pre
combinadas o sea ya se sabían dichas y por supuesto sus respuestas.
Estamos hablando de una conferencia de prensa en
Washington no en La Habana o Teherán. Lo
ocurrido ayer en la conferencia de prensa, y los sucesos alrededor de la iza de
la bandera cubana en la nueva embajada durante la mañana de ayer donde al menos
una persona fue arrestada en lo que trataba de ejercer su derecho a la
protesta, ponen bajo la luz pública la terrible situación que enfrenta en el exterior la causa
por la libertad de Cuba.
Pautas que se están dando. Ayer lo de Washington y hoy ha sido San Salvador. Poco más de una decena de cubanos invitados a
conferencia, esta vez en la capital salvadoreña, son amenazados con ser
deportados a pesar de tener todos, todos sus papeles y visas en orden. Invitación en mano como el caso del joven fotógrafo
Claudio Fuentes Madan. No importa. Nada de lo anterior importa porque la cosa
era sacarlos del país cuanto antes ya que coincidían con la visita de los cinco
espías cubanos de la Red Avispa y podían los invitados con sus presencias
incomodar al régimen del General Raúl Castro Ruz.
Esto es lo que hay mis amiguitas y amiguitos. Y en democracia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario