“¡Ahora sí se cae esta pinga!” Gritan y es el sentir de muchos. Tres días de protestas. Tres noches el pueblo en la calle. Tres días muchos sin luz en Cuba. Más de 100 horas sin electricidad La Habana. Guanabacoa arde. Las calles bloqueadas por los manifestantes. Tres noches que tumba Internet la dictadura. Tres días atrás o algo así que las autoridades de la Isla hacen el insólito pedido de auxilio a Washington por las heridas causadas por el huracán Ian.
Ahora mismo, noche de
Sábado, primera noche de octubre, El Vedado bloqueando las calles. Línea y F, Línea y G. Las calles llenándose de manifestantes dando
cacerolazo. En Línea y Avenida de los
Presidentes los policías rodeando a quienes protestan sin confrontarlos. En toda Cuba, en muchos lugares los
manifestantes han echado a los policías, los viran para atrás con gritos de “¡que
se vayan!” y “¡libertad!”.
Si bien ha sido Cárdenas e Holguín entre otras ciudades y pueblos del país anoche y antenoche, en esta todo parece apuntar que es La Habana el foco. Los vuelos cancelados en el José Martí. Brigadas de respuesta rápida y come candela con palos no han podido esta vez. Ya lo he comentado aquí antes, cuando el 11J, Cuba está teniendo un momento.
Se palpa. Se siente. Son tiempos de liberación.
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