Foto: Claudio Fuentes Madan
Lo que sucedió: el amigo de mi amigo no tenía puesto el pullover y el policía estaba de MUY mal humor. Estaban en una parada y desde la guagua el oficial le gritó que se vistiera, lo que él hizo sin chistar. Lo malo es que al tipo no le bastó y se bajó del ómnibus para pedirle el carnet de identidad. No sólo tenía su carnet, sino que como buen ciudadano y hombre caballeroso llevaba el de su novia, pero el destino que es siniestro quiso que se equivocara y le largara al policía un carnet “con nombre de mujer”.
El recién abuso de poder en el blog de Claudia.
1 comentario:
Voy para allá.
Publicar un comentario