Conozco a mas de unos cuantos expertos, cubanologos, y a mucha otra gente de a pie, que piensa que lo del régimen de Raúl Castro y sus reformas es más de lo mismo. Ya se dio eso una vez, y ahora vuelve a darse igualmente, por razones de necesidad. No estoy de acuerdo. Claro, si me equivoco en pensar que sí se están dando las reformas, demasiado tímidas, no sería la primera vez. Y por supuesto, no será la última. Pero creo que el General y los suyos están convencidos de que para seguir donde están, no pueden seguir como van.
Todo el mundo en Cuba ya sabe que el modelo cubano no funciona, desde los que están en el poder hasta los desposeídos. Creo que en los últimos días se ha estado haciendo evidente que el país va hacia algo así como el modelo vietnamita. Ejemplos son las incursiones hacia el cuentapropismo, y próximamente, los microcréditos.
En lo político, las excarcelaciones de los prisioneros de conciencia, y el dejar salir de la isla a estos y otros disidentes con sus familias, creo que es señal de que al régimen de La Habana le conviene más todos esos desafectos declarados fuera, que dentro de Cuba.
En todo este proceso, vemos simultáneamente como la Iglesia cubana cada día está más acorde con los sentimientos del cubano de a pie. Razón esto último, por lo que el oficialismo se esmera en aparentar ser su aliado.
¿Me equivoco? Quizás, repito, no sería la primera vez y no será la última. Pero de todo corazón, por el bien de mi pueblo que sufre, ojalá que las reformas económicas y las gestiones de la Iglesia tengan éxito. Por lo pronto, en el caso de la Iglesia, ya lo está teniendo.
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