Eduardo Del Llano: “No hay que ejercer la censura, pero sí el respeto”

Quienes comentan mis artículos no siempre están de acuerdo conmigo. Está bien, me encanta tener razón, pero no todos tienen que concordar. En cambio, el insulto y la suspicacia no tengo por qué aceptarlos. Nadie tiene que hacerlo; usted puede recibir en su casa a alguien que discuta sus puntos de vista, pero si el tipo lo insulta lo echará a la calle.

No hay que ejercer la censura, pero sí el respeto. Me pregunto por qué esos dos o tres infelices que pierden su tiempo en ofender entran a una página que obviamente les desagrada. Y ni siquiera se toman el trabajo de investigar a quién leen.

Lo que ocurre es que dichas criaturas necesitan creer eso, o bien que uno es de la Seguridad, para no tener que aceptar que quizás la Cuba de hoy no es como ellos juran que es.